Los objetivos de la enseñanza y la evaluación de la creatividad
¿Qué relación existe entre objetivo de enseñanza y producto creativo?
Debido al importante nexo entre evaluación y objetivo de enseñanza, es menester reflexionar al menos sobre la relación objetivo de enseñanza - producto creativo (más extensamente tratado por el autor en otros trabajos referidos a los vínculos entre pedagogía y creatividad).
Ante todo, se debe precisar por qué el objetivo de la enseñanza es una categoría rectora.
La enseñanza no procura cualesquiera resultados, sino que los esfuerzos de maestros y aprendices (docentes y dicentes, más exacto según diversos autores) se encaminan a la obtención de aquel resultado previsto inicialmente en el objetivo.
Este papel que tiene el objetivo de enseñanza de servir de guía, de orientación, en la labor conjunta del docente y del aprendiz es lo que le otorga a dicha categoría su carácter rector, término que equivale más o menos a dirigir, guiar, conducir, orientar.
Objetivo y resultado
En la enseñanza suelen obtenerse resultados que no eran el objetivo (se haya o no logrado también éste). Entre estos resultados, los puede haber esperados (aunque no declarados, etc. porque no eran el objetivo), pero sí previstos y otros incluso imprevistos.
La obtención de estos otros resultados no tiene que ser considerada negativa, así como el no logro del resultado formulado como objetivo tampoco tiene que tomar siempre una connotación negativa, pues no pocas veces los resultados imprevistos o sencillamente diferentes al que constituye el objetivo, llegan a ser mejores, incluso creativos. Valga aclarar que los resultados creativos son de dos tipos también: previstos e imprevistos.
Sin embargo, en la práctica suele infundadamente considerarse mala una clase si el objetivo no se logró, sin importar el resto de los resultados. Una clase puede ser magnífica a pesar de no lograrse el objetivo, ya sea por:
Debido al importante nexo entre evaluación y objetivo de enseñanza, es menester reflexionar al menos sobre la relación objetivo de enseñanza - producto creativo (más extensamente tratado por el autor en otros trabajos referidos a los vínculos entre pedagogía y creatividad).
Ante todo, se debe precisar por qué el objetivo de la enseñanza es una categoría rectora.
La enseñanza no procura cualesquiera resultados, sino que los esfuerzos de maestros y aprendices (docentes y dicentes, más exacto según diversos autores) se encaminan a la obtención de aquel resultado previsto inicialmente en el objetivo.
Este papel que tiene el objetivo de enseñanza de servir de guía, de orientación, en la labor conjunta del docente y del aprendiz es lo que le otorga a dicha categoría su carácter rector, término que equivale más o menos a dirigir, guiar, conducir, orientar.
Objetivo y resultado
En la enseñanza suelen obtenerse resultados que no eran el objetivo (se haya o no logrado también éste). Entre estos resultados, los puede haber esperados (aunque no declarados, etc. porque no eran el objetivo), pero sí previstos y otros incluso imprevistos.
La obtención de estos otros resultados no tiene que ser considerada negativa, así como el no logro del resultado formulado como objetivo tampoco tiene que tomar siempre una connotación negativa, pues no pocas veces los resultados imprevistos o sencillamente diferentes al que constituye el objetivo, llegan a ser mejores, incluso creativos. Valga aclarar que los resultados creativos son de dos tipos también: previstos e imprevistos.
Sin embargo, en la práctica suele infundadamente considerarse mala una clase si el objetivo no se logró, sin importar el resto de los resultados. Una clase puede ser magnífica a pesar de no lograrse el objetivo, ya sea por:
- Su mala determinación y formulación - y aquí la deficiencia no está en la clase en sí, sino en su preparación
- O porque las condiciones esperadas variaron. Por ejemplo, hay profesores a quienes se les evalúa de mala una clase porque el día de la visita de control algunos alumnos se enfermaron, no asistieron y por tanto, no expusieron su parte correspondiente del seminario, lo cual se requería para el logro del objetivo de la clase, por todos, o sencillamente, porque se considera dogmáticamente que con tantos ausentes una clase no puede ser buena.
Definición de objetivo de enseñanza
¿Cuál de los aprendizajes resultantes de la enseñanza se convierte en objetivo de enseñanza?
No todo futuro resultado de la enseñanza puede ser escogido como objetivo.
Ello se debe a que los resultados pueden ser tantos que dejarían los objetivos de tener el carácter rector que es esencial en ellos, es decir, dejarían de ser objetivos. Por tanto, hay que prever o anticipar no sólo un resultado, sino cuantos sean posibles y necesarios y, de entre ellos, seleccionar, o sea, decidir (y esto es esencial a la dirección), cuál es el principal y que, por tanto, hacia su logro se orientarán los esfuerzos básicamente de enseñantes y enseñados.
Los resultados para ser elegidos como objetivos han de ser también deseables. Tal vez no siempre los más deseables, pero sí deseables en alguna medida, ante todo, por quienes se empeñarán en alcanzarlos (lo cual no niega que se puedan corresponder con intereses más amplios como los sociales). Ello es lo que le dará la fuerza necesaria para movilizar a los sujetos hacia su logro.
Se le puede llamar objetivo de enseñanza a algo que los maestros y alumnos no desean en absoluto lograr, y que por tanto, más bien tratan de evitar llegar a tal resultado. Sin embargo, por darle a dicho resultado "esperado" el nombre de objetivo de enseñanza, no quiere decir que llegue a ser por decreto un verdadero objetivo de enseñanza.
Además, no todos los resultados deseables pueden ser objetivos de enseñanza, porque no basta el ser deseables únicamente. Han de ser igualmente alcanzables y en esto se diferencian los objetivos de los ideales y fines (o ideales supremos), hacia los cuales también nos orientamos, pero sin llegar a alcanzarlos totalmente, pues dejarían de ser tales.
Finalmente, hay otro tipo de resultados que son deseables y realizables, pero que no constituyen objetivos de la enseñanza porque sencillamente son intangibles y los objetivos han de ser de algún modo medibles, comprobables, tangibles, evaluables, mensurables. Esto es lo que permite comparar si lo esperado como objetivo se ha logrado o no.
Hasta aquí hemos visto que el objetivo de la enseñanza siempre es:
- Un aprendizaje a lograr por el dicente. Es lo que se espera aprenderá el educando, no lo que hará el docente para ello, ni lo que logre el docente, en tanto no sea lo obtenido por el aprendiz.
- Un resultado de la enseñanza.
- Una alternativa de resultado, porque son posibles de ser obtenidos diversos resultados y de hecho una parte se logran, aunque no se escojan como objetivos.
- Una decisión, es decir, implica la elección de hacia cuál de las alternativas de resultados posibles y deseables, se encaminan las actividades interrelacionadas de enseñar y aprender.
- Un resultado principal, lo cual implica jerarquizar, determinar la importancia de obtener uno u otro. No es optar por este o aquel posible resultado. No da lo mismo uno que otro. Aquí, entre otras cuestiones hay que considerar la conocida derivación gradual de los objetivos a partir del fin de la educación, la llamada zona de desarrollo próximo, etc.
- Un resultado anticipado de lo que se enseñará (y por tanto se aprenderá).
- Un resultado orientador, hacia cuyo logro se encaminan todos los esfuerzos de maestros y alumnos.
- Un resultado alcanzable, por tanto relativamente incierto, pues por referirse al futuro, a lo que está por venir, podrá o no ser alcanzado, en dependencia de si se dan o no las condiciones - también esperadas - requeridas.
- Un resultado deseable.
- Un resultado comprobable.
Por tanto el objetivo de enseñanza es aquel aprendizaje elegido como una de las alternativas de resultado de enseñanza, tal que ese resultado sea principal, anticipable, orientador, alcanzable, deseable y comprobable.
¿Las variables originalidad y exactitud del objetivo de enseñanza?
El producto creativo no siempre se prevee. Puede llegarse a un resultado insólito, impredecible, inesperado. También hay resultados que no es necesario preverlos por irrelevantes. Además, se pueden obtener resultados imprevistos importantes y no creativos. Considerando el carácter anticipado del objetivo de enseñanza, ninguno de ellos constituyó un objetivo de enseñanza, a menos que se hubiese establecido inicialmente algún grado de precisión (por ejemplo, que fuese un resultado original).
Según el grado de originalidad esperado los objetivos se pueden clasificar en creativos y reproductivos.
En el caso de los objetivos creativos, mientras más predecible es el resultado concreto a alcanzar, menor es el nivel de creatividad esperado (resultado desconocido para el alumno, pero conocido para el profesor) y mientras menos predecible sea el resultado concreto a alcanzar, mayor es el nivel de creatividad esperado (resultado concreto desconocido tanto para el alumno como para el docente). Es decir, el maestro tampoco conoce cuál resultado concreto se alcanzará, aunque sí espera que sea original, por eso se trata de un objetivo creativo. La precisión del objetivo no está aquí en el resultado concreto en sí, sino en la exigencia de que sea original.
Lo anterior se corresponde con una ley de la pedagogía y psicología (educación, enseñanza y aprendizaje) de la creatividad, la cual puede ser formulada como ley de la relación inversamente proporcional entre el nivel de creatividad esperado y la predicción del resultado concreto a alcanzar por el aprendiz.
Mediante el siguiente gráfico se puede ilustrar esta ley. Aunque sólo se marcaron 6 puntos a modo de ejemplo, la diversidad de resultados posibles es mucho mayor.
Ley de la proporción inversa del nivel de creatividad respecto al resultado concreto esperado del aprendiz.
Esto implica que hay objetivos en los cuales es diferente el grado de exactitud establecida en él, con respecto al resultado concreto esperado (objetivos y resultados precisos y relativamente imprecisos), lo cual se corresponde con otra de las tipologías de objetivos de enseñanza que pueden establecerse.
Estas peculiaridades de los objetivos de enseñanza creativos han de tenerse en cuenta en la dirección del aprendizaje y por tanto, en su control y evaluación, si se pretende avanzar hacia una enseñanza y aprendizaje creativos y lograr evaluar la creatividad de los resultados obtenidos por los alumnos.
Es menester dar paso a concepciones pedagógicas sobre los objetivos de enseñanza y la evaluación del aprendizaje que tiendan a favorecer el desarrollo de la creatividad.
Autor: Jorge Ojeda, jorge.ojedamatias@gmail.com
(Adaptado y desarrollado a partir de Ojeda, J.: Creatividad. Enfoques, evaluación, estrategias. Editorial Inspiración, Santiago de Cuba, 2001 y de otros materiales docentes del autor).
Etiquetas: Estudio de la creatividad, Jorge Ojeda
Tweet |
1 Comentario/s:
=)
bbbbuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu
Escrito por Anónimo @ abril 13, 2012 6:47 p. m.
Publicar un comentario